By Olga Arellano
Last Sunday, February 23rd, something really especial happened: four generations of women shared and enjoyed our Nanacycle or Yayacleta, the name we gave in Corella to our lovely tricycles.
Lola, the granny, Olga, the daughter and pilot, Naiara, the granddaughter, and Layla, the grand-granddaughter, enjoyed a wonderful ride with our unique Yayacleta. We’ve kept the text in Spanish because Olga wrote this article right from her heart:
CUATRO GENERACIONES EN LA YAYACLETA.
Mi experiencia como piloto de la Yayacleta, por Olga Arellano. Voluntarios, Toni y Rebeca.Hoy he llevado a una persona muy especial , mi madre “La Fortega”como la llamo yo cariñosamente. Me ha costado mucho sacarla de casa para dar un paseo por Corella, por que siempre tiene cosas que hacer.Cuando hemos ido a recogerla a casa con la Yayacleta ha sido un momento muy especial para mi, para mi madre con cara de sorpresa también ya que estábamos yo Olga como hija, Naiara como nieta y Leyla Bisnieta, cuatro generaciones con la Yayacleta de paseo por Corella, casi nada.El paseo ha sido muy agradable por la Ciudad y sus calles, ya que mi madre hacia mucho tiempo que no paseaba por sus calles.Pensando en voz alta , que poca vergüenza tengo de no haberlo hecho antes este magnifico paseo con mi madre.Mi madre nos ha contado varias historias con forme la Yayacleta avanzaba despacio por las calles y lugares que le suponían muchos recuerdos de juventud.Llegando ya a las afueras de Corella camino a la Estanca y a su paso por el Paseo de las Ramblas, nos ha contado como cuando eran adolescentes se escondían para ver a las parejas de novios como se besaban, jajajajaja la nieta Naiara y Bisnieta Leyla con una mirada cómplice las jovenzuelas se partían de la risa y le comentaron a su abuela que eran unas chusmillas, jijijijiji.Otra de sus pequeñas historias que nos ha contado era como por el otro camino bajando a la Estanca iba ella y su hermano a recoger las cerezas del huerto y que le suponía muchísimos recuerdos.Pasando por el jardín del Ciudadano del cual es responsable con su iniciativa Rebeca la voluntaria de la Yayacleta le comento mi madre que lo que mas le gustaba eran las flores, ya han quedado otro día para enseñarle mi madre su patio de casa.En la Estanca que es un lugar precioso para caminar o correr que tenemos los Corellanos para desconectar del día a día nos hemos encontrado con muchos pescadores y gente paseando con los hijos y sus bicis.A mi madre le ha alegrado muchísimo encontrarse con tanta gente paseando y ver la Estanca llena de agua y ese color tan azulado, nos comento que hacia por lo menos 30 años que no paseaba por ella.Curiosamente una familia con su hijo Dylan nos ha pedido si podía hacer una foto con ellos y la Yayacleta a la cual accedimos cariñosamente.Pues esta es mi pequeña historia de cuatro generaciones con mi Madre y la Yayacleta,Siempre es un placer pasear a las personas que lo necesiten , pero si es tu propia madre es mas reconfortante y un orgullo.Te quiero mi Fortega favorita.
