En el taller se dieron pautas para combatir la desinformación, en definitiva, de cómo podemos identificar y detectar información falsa.
Pero en este caso se trataron con especial atención los “deep-fakes”, que son falsificaciones que modifican vídeos, imágenes o las voces de una persona, generalmente famosa, manipulando su mensaje o acciones y que tienen especial relevancia entre el público joven por los riesgos que conllevan.